EL PECADO: LIBRE ALBEDRIO, UNA ANTINOMIA? III parte
Finalmente: el “pecado”, tal que instancia acusatoria, existe como privacía vivencial en el Hombre común, en su inconsciente y en su pensamiento habitual aprendido. No hay límite a la voluntad y a las posibilidades de ejecución humanas en términos de “pecado” puesto que es un entorno abierto, sin restricciones de primer momento. Y, ante esto: qué significa ‘la Libertad’, en todo caso? Y el Libre Albedrío, resultará ser plena y exactamente libre… O no tanto?… O hasta dónde? Una prédica persistente sobre este punto es el Determinismo, según el cual al Hombre le está asignada una pequeña porción de existencia terrenal tras lo cual, su integración al Cosmos será necesaria, de uno u otro modo: esta es la opción de prácticamente todas las religiones formales que se ocupan del “telos” humano. Y se predica también el nihilismo, para el cual, por el contrario, no existe ningún futuro y el alma humana se apaga al morir el Ser humano, con lo que termina su eventualidad ética y e